Fue una gran tarde de parrilla, unos buenos drinks y platicas amenas con los amigos, pero ahora bien otra parte importante de la misma, la limpieza del asador, que si, es lo menos divertido de todo pero igual de importante, tener tu asador limpio te ayudará a mantenerlo en buenas condiciones por más tiempo
Si tu asador trae instructivo en el mismo debe indicar los pasos ideales para hacer la limpieza del mismo, desde el tipo de productos que puedes usar, el desarmado y todo lo que se requiera para su correcta limpieza.
Si tu asador no trae instructivo o como buen macho alfa lo tiraste sin leerlo aquí te paso unos tips generales que se puede aplicar a cualquier asador.
Si tu asador no trae instructivo o como buen macho alfa lo tiraste sin leerlo aquí te paso unos tips generales que se puede aplicar a cualquier asador.
Haz una limpieza previa con el asador aun caliente
No esperes a que el asador se enfríe por completo, cuando aún está caliente es mucho más fácil retirar muchos de los restos de carne y grasas, para este paso lo ideal es usar un cepillo de alambre.
Si no cuentas con uno te dejo un enlace para que busques las mejores opciones dentro de Amazon, y para esta ocasión puedes usar la mitad de una cebolla grande para tallar la parrilla. Otra opción, o complementaria sería usar limón o vinagre.
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Una vez frío, lávalo
Ya que el asador está frío debes pasar a lavarlo, quitando el exceso de carbón, leña y cualquier otro resto que tenga.
Puedes utilizar una fibra y agua con jabón, si el asador es de acero inoxidable se recomienda que la fibra la utilices por el lado de la esponja y secarlo con un trapo de microfibra.
Si es necesario puedes utilizar una piedra pómez para tallar la parrilla y/o partes de uso rudo.
Una vez limpio y seco es muy recomendable que lo guardes en un lugar seco, y de preferencia protegido con una funda especial, así quedará limpio y listo para tu próxima parrillada.
Puedes utilizar una fibra y agua con jabón, si el asador es de acero inoxidable se recomienda que la fibra la utilices por el lado de la esponja y secarlo con un trapo de microfibra.
Si es necesario puedes utilizar una piedra pómez para tallar la parrilla y/o partes de uso rudo.
Una vez limpio y seco es muy recomendable que lo guardes en un lugar seco, y de preferencia protegido con una funda especial, así quedará limpio y listo para tu próxima parrillada.
